La de ayer fue una jornada muy dura: empate en cero contra el equipo chino que el año pasado eliminó a Spiritual Machina. Sin embargo, la diferencia de goles permitió avanzar a la siguiente ronda. "Tuvimos varias posibilidades de gol que hicieron transpirar al arquero y temblar a la tribuna rival, eran unos cuantos los que alentaban a nuestro oponente", comentaron los integrantes de Spiritual Machine tras el empate."Nuestro arquero no la tocó, pero igualmente el partido fue de ida y vuelta y podría haber pasado cualquier cosa", agregaron. Gracias a la amplia diferencia de goles del partido pasado (21-0), el equipo logró clasificar segundo entre los ocho finalistas. "Esto nos pone entre los favoritos (varios se acercaron a charlar y preguntar cosas del equipo) y nos asegura por lo menos un sexto puesto en el campeonato", dijeron Gonzalo Mon y Hernán Freedman."El rival que nos toca ahora juega muy trabado, estuvimos filmando y estudiando su juego hasta tarde. Luego de este partido el que seguiría es más accesible a nuestra forma de juego, así que creemos que las chances son buenas", explicaron.
Fuente: Infobae
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